No dude a la hora de escoger esta profesión, me puse a ello, y desde que lo empecé a estudiar cada vez me entusiasme más. La curiosidad me podía...y había miles de preguntas que quería resolver...
¿cómo se relacionan con los demás? ¿cuando empieza a oír y ver un bebé? ¿cómo desarrollan los sentidos? ¿qué piensan?¿por qué lloran?
Preguntas que iré resolviendo poco a poco y que nunca dejaré de descubrir.
Quiero entrar cada día a un lugar dónde seré recibida con un abrazo y una sonrisa, donde sé que enseñare y aprenderé y sobretodo, en un lugar donde la música, la creatividad, la fantasía, los juegos y las dificultades...nos harán crecer a todos en el esfuerzo del día a día en la escuela infantil.
